El colegio episcopal católico ortodoxo asume la responsabilidad de la fe y la moral

9 months ago
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El oficio papal es esencialmente responsable de la protección de la fe y la moral. Transfiere esta responsabilidad a la Congregación para la Doctrina de la Fe. El papa Francisco, quien destruye abiertamente los fundamentos de la doctrina católica, se ha autoexcluido de la Iglesia católica (Ga 1, 8-9) y por lo tanto no puede ser su cabeza legítima.
Los fieles y los sacerdotes literalmente nos bombardean a nosotros, obispos, con preguntas:
- ¿Qué pasa con su entrega a los demonios en Canadá con el acompañamiento de silbidos de un hechicero que soplaba un silbato de hueso de pavo salvaje?
- ¿Qué pasa con la entronización del demonio Pachamama en el Vaticano?
- ¿Qué pasa con el camino sinodal, que el cardenal Müller calificó de doctrinalmente incompetente y canónicamente ilegítimo?
- ¿Qué pasa con la promoción de la sodomía por parte de Bergoglio?
- ¿Cómo es posible que Francisco guarde silencio dando luz verde así a las actividades de las conferencias episcopales alemana y belga, que introducen matrimonios de sodomitas, lesbianas y llamadas parejas queer, incluyendo incluso matrimonios con animales? ¡Esto no es solo apostasía, sino también estupidez!
Los obispos diocesanos, agotados por el trabajo pastoral, solo dan respuestas evasivas a las cuestiones planteadas anteriormente. No ponen las cosas en la luz correcta. Encubren estos escándalos en un esfuerzo por preservar, al menos en la medida de lo posible, la autoridad papal de la que se está abusando gravemente.
Sin embargo, nosotros, los obispos eméritos de la República Checa y Eslovaquia, somos plenamente conscientes de nuestra responsabilidad pastoral ante Dios en los tiempos actuales de caos religioso y moral. Esta responsabilidad recae sobre nosotros especialmente ahora, porque sin fe verdadera no hay salvación.
En cuanto a Francisco, tenemos que declarar responsablemente ante Dios y ante todos los católicos de la República Checa y Eslovaquia: el camino que él promueve no es católico ni cristiano. Y si queréis saber la pura verdad, la Iglesia católica actualmente no tiene un papa legítimo; se encuentra en estado de sede vacante.
¿Qué deben hacer los sacerdotes y los fieles en esta situación? Respondemos: primero deben aceptar esta realidad y luego hacer penitencia personal y dedicar más tiempo diario a la oración, al diálogo con Dios.
¿Y qué debemos hacer los obispos verdaderamente católicos eméritos? Debemos animarnos unos a otros a permanecer firmes y no traicionar a Cristo en medio de las presiones actuales y en la lucha por la salvación de las almas y por la supervivencia de la Iglesia de Cristo. Pronto comparecemos ante el tribunal de Dios a causa de nuestra vejez. Si traicionamos las enseñanzas de Cristo por miedo a la persecución o si permanecemos callados, la responsabilidad del suicidio espiritual caerá sobre nosotros. Por eso, queridos fieles, orad por nosotros y también os agradecemos cada palabra de ánimo.
Quienes están destruyendo la Iglesia utilizan métodos tanto espirituales como psicológicos de subterfugio, intimidación y amenazas. Nos atacarán y denigrarán. Esta es la razón por la cual necesitamos de vuestro apoyo espiritual y oraciones. Queremos luchar por vosotros y por la herencia de nuestros padres espirituales, por la herencia de la enseñanza católica ortodoxa fundamentada en la Sagrada Escritura y la tradición. Hoy en día, los términos ambiguos y los clichés religiosos pueden fácilmente utilizar la verdad para impulsar objetivos opuestos. Francisco es un ejemplo negativo de tal retórica. Recientemente nombró al argentino Fernández prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe. Su presentación pública indica que esta Congregación ahora hará lo contrario de lo que estaba destinada a hacer. Del mismo modo, el camino sinodal de Bergoglio es lo contrario del camino de salvación de Cristo relacionado con la observancia de las leyes y los mandamientos de Dios. Además de promover la legalización de la sodomía y la idolatría, el camino sinodal también promueve el relativismo y el sincretismo decadentes.
Nuestro colegio apostólico, que no está limitado por edad, asume en estos tiempos de caos y confusión la responsabilidad de la pureza de la fe y la moral en el territorio de la República Checa y Eslovaquia.
Con esta carta, animamos también a todos los obispos eméritos, que se preocupan por la pureza de la fe y la moral, a asumir este deber de protección en cada nación. La disponibilidad de una estructura doctrinal separada en cada nación resulta de la situación crítica en la que se encuentra la Iglesia católica debido al abuso de la autoridad papal. En esta situación extraordinaria, hasta que sea designado un papa ortodoxo y legítimo, la responsabilidad en cuestiones de fe y moral recae en nuestro colegio de obispos. Nuestro servicio en esta situación resulta totalmente obligatorio para la conciencia de todo cristiano católico. Todos están obligados a adherirse a la enseñanza ortodoxa que nosotros, como colegio apostólico, defendemos en una nación determinada. Somos plenamente conscientes de nuestra autoridad y responsabilidad compartidas.
Por la presente carta proponemos que la responsabilidad de toda la Iglesia, en nombre del colegio apostólico de obispos católicos ortodoxos, sea asumida por el cardenal Müller, ex prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, y Carlo Maria Viganò, ex nuncio en Estados Unidos.
Concretamente en la República Checa y Eslovaquia, esta responsabilidad ante Dios y la Iglesia la asumen el cardenal Dominik Duka y el arzobispo Ján Sokol.
(Bosquejo de carta fue elaborado por los obispos del PCB el 19 de agosto de 2023)

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