La Zona Libre (Desclasificación OVNI)

Aliens y Ovnis: ¿qué hay de cierto en las revelaciones de un exagente estadounidense? Los ovnis son un fenómeno que ha intrigado a muchos durante décadas. ¿Son visitantes de otros mundos? ¿Qué saben los gobiernos sobre ellos? ¿Por qué se oculta la verdad? Estas preguntas han cobrado relevancia en los últimos años, especialmente en Estados Unidos, donde se han producido varios hechos que han despertado el interés y la polémica sobre este tema. Uno de ellos fue la publicación, en 2017, de un vídeo por parte del Departamento de Defensa, en el que se veía a dos pilotos siguiendo a un extraño objeto volador. El vídeo era de 2004, pero no se había hecho público hasta entonces. Junto con él, se reveló la existencia de un programa secreto del Pentágono, llamado AATIP, que se dedicaba a investigar los ovnis desde 2007 hasta 2012. El responsable del programa era Luis Elizondo, un exoficial de inteligencia que renunció a su cargo en 2017 y se unió a una organización privada llamada TTSA, fundada por el músico y ufólogo Tom DeLonge. La TTSA se presentó como una iniciativa para divulgar la verdad sobre los ovnis y promover la investigación científica y tecnológica sobre este fenómeno. La TTSA fue la encargada de difundir otros dos vídeos de ovnis grabados por pilotos en 2015, que también fueron confirmados como auténticos por el Pentágono en 2020. Estos vídeos mostraban objetos voladores con formas y comportamientos anómalos. Estas imágenes causaron un gran impacto, y provocaron que el Congreso exigiera al Pentágono que elaborara un informe sobre los llamados UAPs (Fenómenos Anómalos No Identificados), el término oficial que sustituyó al de UFOs. El informe fue publicado en junio de 2023, y aunque no ofreció ninguna conclusión definitiva sobre el origen o la naturaleza de estos fenómenos, reconoció que existían 144 casos documentados desde 2004, de los cuales solo uno pudo ser explicado como un globo aerostático. El resto seguían siendo un misterio. El informe también admitió que algunos de estos fenómenos representaban un riesgo potencial para la seguridad nacional y la seguridad aérea. Además, sugirió la posibilidad de que algunos de estos objetos fueran tecnologías avanzadas desarrolladas por otros países o por entidades no gubernamentales. Sin embargo, el informe no descartó ni confirmó la hipótesis extraterrestre, lo que dejó insatisfechos a muchos aficionados y expertos en el tema. Entre los más críticos se encontraba David Grusch, un exagente de inteligencia que había trabajado para el UAP Task Force y para otro grupo especializado en los OVNIs. Grusch se convirtió en un informante en mayo de 2022, cuando presentó una denuncia formal ante la Oficina del Inspector General de la Comunidad de Inteligencia, en la que acusaba al Pentágono de encubrir la existencia de ovnis y de restos biológicos de origen no humano. Grusch afirmó que había recopilado testimonios, documentos y fotografías que demostraban que el gobierno poseía vehículos intactos o parcialmente intactos de origen no humano. Grusch también aseguró que el Pentágono había aprobado programas secretos para estudiar estos objetos y sus restos.