Democrats want non-citizens to be able to vote

Speaker Mike Johnson: "We were too close to a federal election to make changes to the voting system. And then they said that non-citizens don’t actually vote. And then they said that the SAVE Act would somehow result in voter suppression. All of that was complete nonsense.

Now they’re saying that the SAVE Act would disenfranchise married women who change their last name. I mean, it’s absurd. What they’re trying to do is protect the possibility of non-citizens participating in our elections, plain and simple. That’s what this is about.

And we know it’s a crisis because the previous administration, as we all know, opened the border wide. And we had, by some estimates, 20 million illegal aliens entering the country, right? There is no mechanism in federal law, in current law, that requires states to verify citizenship.

So, although it is currently illegal and that only U.S. citizens should decide U.S. elections, there is no way to ensure that this is actually happening.

So the SAVE Act is critically important. It follows common sense. And the American people are with us. The Democrats, I predict, will not be, and they will have to answer for it."

traducir al ingles: Desde el punto de vista del Partido Republicano, las acciones impulsadas por el Partido Demócrata en los últimos años para permitir que personas no ciudadanas puedan votar en las elecciones de Estados Unidos son preocupantes y contrarias a los principios fundamentales del sistema electoral estadounidense. Los republicanos ven estas iniciativas como un intento de socavar la integridad de las elecciones y diluir el valor del voto de los ciudadanos estadounidenses.

Los republicanos argumentan que el derecho al voto debe ser exclusivo para los ciudadanos estadounidenses, ya que esto refleja el principio de soberanía popular y garantiza que quienes participen en las elecciones tengan un vínculo claro con el país y su futuro. Consideran que permitir que no ciudadanos voten, incluso en elecciones locales, abre la puerta a un sistema electoral vulnerable a la manipulación, ya que aquellos sin la plena ciudadanía no deberían tener voz en la toma de decisiones que afectan a la nación.

Además, los republicanos sostienen que estas acciones demócratas no solo son inconstitucionales, sino que también podrían tener un impacto negativo en la seguridad electoral y en la confianza del público en el sistema. Los críticos dentro del Partido Republicano argumentan que al permitir que personas no ciudadanas voten, se incrementaría el riesgo de fraude electoral y se debilitaría el sistema de representatividad, pues los no ciudadanos no están sujetos a las mismas obligaciones y responsabilidades que los ciudadanos del país.

En resumen, las propuestas del Partido Demócrata para extender el derecho al voto a los no ciudadanos son un intento de alterar el sistema electoral de Estados Unidos y una amenaza a la soberanía de los votantes estadounidenses.