El cambiante orden global - migrantes, banqueros y el surgimiento de nuevas potencias

El orden global actual está marcado por una creciente división entre el 1% y el 99%, con poderosas élites financieras que dan forma a las políticas que sirven a sus propios intereses. Mientras tanto, las antiguas potencias coloniales como el Reino Unido y Francia están perdiendo influencia en África y Asia, reemplazadas por potencias emergentes como China, Rusia y Turquía. Sin embargo, es poco probable que la larga historia de explotación en estos continentes termine pronto. Mientras la corrupción siga profundamente arraigada en la naturaleza humana y los sistemas globales sigan sirviendo a los intereses de unos pocos en detrimento de los de la mayoría, la lucha entre los poderosos y los oprimidos persistirá, ya sea en el Reino Unido, en África o en otros lugares. Sin embargo, la historia ha demostrado que esos desequilibrios no pueden durar indefinidamente. La arrogancia de la élite, su distanciamiento de las masas, puede muy bien conducir a su caída final, a medida que los levantamientos y las revoluciones se conviertan no sólo en una posibilidad, sino en algo inevitable.