23ª Continuación EL 12º PLANETA

El Antiguo Testamento registra el ascenso a los cielos de varios seres mortales. El primero fue Henoc (Gén.5,21-24 "Henoc anduvo con Dios, y desapareció porque Dios se lo llevó"). Era un patriarca antediluviano que entabló amistad con Dios, fué bisabuelo de Noé el héroe del Diluvio. El otro mortal "llevado al cielo" fue el patriarca Elias, arrebatado en un "torbellino" II Reyes 2,11. otra referencia en el Antiguo Testamento de un tercer mortal que visitó la "Morada Divina" y que fue dotado allí de una gran sabiduria; se trata de un rey de Tiro (antigua ciudad de lo que hoy es Líbano, en las costas del Mediterráneo). En el libro de Ezequiel 28,1-2 El señor Yahveh le encarga al profeta que le recuerde al rey, cómo, siendo perfecto y sabio, la Deidad le había permitido que fuera a ver a los dioses. Pero le reprocha que "tu corazón se ha engreido diciendo "soy un dios". En textos sumerios más antiguoss que los textos bíblicos del Antiguo Testamento se habla también de varios hombres que tuvieron el privilegio de ascender a los cielos; uno de ellos fue Adapa, primer humano en ser llevado a los cielos y al Cielo (Nibiru), hijo de Enki con una terrestre; inteligente en extremo, llamado "el sabio de Eridú". Adapa: el Adán del Génesis, padre de Caín, Abel, Set y otros hijos e hijas que no se mencionan en el texto bíblico.