El PCB: La respuesta a la entrevista del cardenal Burke sobre cómo no oponerse a Francisco, sino amarlo

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El 16 de marzo de 2023, el cardenal estadounidense Raymond Burke concedió una entrevista a EWTN. Al principio, expresó cierta verdad sobre la situación actual de la Iglesia, que todo católico sincero percibe. Pero el problema es que la verdad enunciada fue seguida por un mortífero veneno espiritual.
¿Qué dijo el cardenal al comienzo de la entrevista?
«Simplemente hay que dejar claro que la cuestión del plan de Dios para el hombre y la mujer, Su plan para la unión sexual, Su plan para el matrimonio, no se pueden debatir, ¡tal debate es absurdo!».
Sin embargo, el Sínodo sobre la sinodalidad bajo la dirección del pseudopapa Bergoglio directamente promueve la negación de que la sodomía es el pecado y paralelamente legaliza todo tipo de otras perversiones englobadas en el término LGBTQ.
¿Qué dijo Burke sobre el sínodo en general?
«El sínodo sirve para reflexionar sobre la enseñanza de la fe, la sana doctrina, la disciplina de la Iglesia, sobre cómo predicarla y examinarla de manera más efectiva en un período de tiempo determinado, y no para inventar una nueva enseñanza».
Tenemos que estar de acuerdo con esto, porque esta posición es verdadera y plenamente católica. Burke habla además sobre el Sínodo actual de Bergoglio: «Si esto es lo que va a suceder en el Sínodo, en otras palabras, si se va a inventar alguna nueva enseñanza, entonces este veneno, esta deserción de la doctrina y la práctica católica, afectará a toda la Iglesia. Es una situación imposible. Esto tiene que parar».
Pero eso es exactamente lo que está sucediendo. La legalización eclesiástica de LGBTQ es una nueva enseñanza promovida por el proceso sinodal. Preguntamos quién tiene la autoridad para detenerla. ¡El papa, por supuesto! Ese es su deber y responsabilidad primordiales. Sin embargo, hoy en día es más bien lo contrario: quien representa el papado está imponiendo deliberadamente la difusión de esta nueva enseñanza. Por lo tanto, se plantea otra pregunta: ¿Es Francisco un papa válido? ¿Es un vicario legítimo de Cristo en la tierra? ¿O es un papa ilegítimo, un impostor religioso y un judas?
La respuesta es clara: ¡Francisco no es un papa legítimo! Además, el pseudopapa Bergoglio requiere que cada obispo pase por un proceso de «conversión» y luego acoja a las personas LGBTQ impenitentes en la Iglesia. Pero esto significa la transformación de la Iglesia en una anti-Iglesia de la Nueva Era. Esta es una traición y rebelión contra Dios, contra Sus mandamientos y Sus leyes. Al frente de esta rebelión se encuentra el falso papa Francisco.
El cardenal Burke destaca en la entrevista que combatir las «reformas» no significa oponerse a Francisco, ¡sino amarlo! Esta actitud es un signo de la esquizofrenia religiosa del cardenal Burke. ¡Esta revelación es desconcertante! Es una manipulación y piedra de tropiezo para los católicos genuinos. ¡Y, además, es un pecado público! Si realmente amamos al pseudopapa Francisco, estamos obligados a pedirle que renuncie. Por esta penitencia pública salvaría su alma inmortal. El cardenal Burke, sin embargo, no llama a Francisco a renunciar, lo que indica que no lo ama, aunque insta a los católicos a hacerlo. Pero entonces Burke ni siquiera ama a Cristo. Amar falsamente a Francisco significa ignorar que niega los diez mandamientos, especialmente el primero, así como los mandamientos de Cristo, y, consecuentemente, más tarde seguir sus pasos. ¡Tales falsos amantes arriesgan a ser condenados para siempre! Es que deben respetar la entronización del demonio Pachamama así como la consagración de Bergoglio a los demonios y Satanás bajo la guía de un chamán en Canadá. ¡Estos fueron gestos públicos de apostasía! Cientos de miles de mártires prefirieron sufrir las más crueles torturas y muerte antes que cometer idolatría. Francisco ha incurrido en el castigo más severo de Dios: el anatema (según Ga 1, 8-9), así como en la pena eclesiástica más severa: la excomunión latae sententiae, es decir, la expulsión tanto del Cuerpo Místico de Cristo como de la estructura eclesiástica externa, por la proclamación de un evangelio falso.
En cuanto a la agenda LGBTQ, ni siquiera toma en cuenta el pecado del adulterio, del que Cristo advierte con urgencia en el Sermón de la Montaña. Jesús deja claro que incluso un pecado cometido con la vista concupiscente o consentimiento en el corazón es un obstáculo para la salvación. El hombre debe separarse de su consentimiento interior al pecado por medio del arrepentimiento. En este contexto, Jesús habla de cortar la mano o el pie o sacar el ojo, así como del fuego del infierno. Asimismo, es necesario romper con la concupiscencia pecaminosa recurriendo al arrepentimiento (cf. Mt 5, 27 s.).
San Bonifacio emprendió una misión en el territorio de la actual Alemania. Al enterarse de que el rey Ethelbaldo de Inglaterra se entregaba a una vida disoluta, lo reprochó:
«Piensa en la gran vergüenza que es entregarse a las pasiones y vicios bestiales ofendiendo así al santísimo Dios. Incluso entre los sajones paganos, la castidad se tiene en tan alta estima que si una doncella se deja corromper, es ahorcada. Si una esposa mancha el tálamo nupcial se la ahoga, y después de haber quemado su cuerpo, cuelgan su amante en un patíbulo. Los eslavos polabianos tienen tanto respeto al sagrado vínculo conyugal que una mujer no quiere contraer otro matrimonio si su marido muere. Entonces, si los gentiles, que no conocen al verdadero Dios, valoran tanto la pureza moral, tú que eres un príncipe cristiano ¿no te avergüenzas de los desórdenes a que por un amor criminal te entregas?».
Estas actitudes corresponden en muchos aspectos a la ley de Dios. Pero las actitudes LGBTQ promovidas por el actual pseudopapa Bergoglio contradicen tanto las normas morales objetivamente válidas como la ley de Dios. El apóstol Pedro (2 P 2, 6) y el apóstol Judas (Jud 7) advierten contra la sodomía destacando el castigo del fuego temporal y eterno. El apóstol Pablo también advierte que los sodomitas impenitentes no tendrán parte en el reino de Dios.
San Pablo llama a la sodomía «atimia»: «abominación» (Rm 1, 26). La sodomía también está ligada al delito de pedofilia. Sin embargo, a su regreso de Panamá, Bergoglio aprobó autoritariamente la educación sexual, que hoy en día promueve la sodomía y la transexualidad, y también se pronunció ante los medios de comunicación a favor del sexo sin rigidez para los niños. Este es un crimen grave contra los niños y contra Dios. Pero según lo dicho por Burke, ¡debemos amarlo por eso y considerarlo, contrariamente a las enseñanzas de la Iglesia, el vicario de Cristo en la tierra! ¿Cómo puede Judas, el traidor, ser el vicario de Cristo? Burke nos alienta a caer en esta esquizofrenia.
Al besar los pies de un transexual, el pseudopapa aprobó la abyección del transexualismo y su consecuencia, a saber, la cirugía criminal de cambio de sexo. Es una mutilación de por vida de una persona, no solo a nivel físico, sino también mental. Es una clara rebelión contra Dios Creador. El pseudopapa incluso instó a los padres en Irlanda a no impedir que los niños manipulados por la propaganda LGBTQ acepten perversiones sexuales.
El camino sinodal de Bergoglio destinado a la legalización de LGBTQ contradice diametralmente el camino evangélico de Cristo que conduce a la salvación. La letra «Q» engloba incluso los asesinatos sexuales. Cierto hombre con la orientación de tipo «Q» cortó la garganta a más de 50 mujeres. En la actualidad, cada obispo está obligado a acoger a esas personas en la Iglesia; de lo contrario, según Bergoglio, no puede ser obispo.
Burke afirma en su entrevista: «Combatir las “reformas” no significa oponerse a Francisco, ¡sino amarlo!».
Preguntamos: si un católico ni siquiera puede oponerse a él, ¿significa eso que tiene que aceptar todas sus herejías? Si es así, Burke es más culpable de poner a los católicos en confusión que Bergoglio. Si bien se presenta a sí mismo como verdaderamente católico, alienta a los católicos a abrazar las herejías más graves llamándolos a amar a Francisco y no oponerse a él. ¡Esto es absurdo!
Un archihereje se ha excluido a sí mismo de la Iglesia. No puede ocupar el cargo de sacerdote ni de obispo, y mucho menos de papa. ¿El cardenal Burke no sabe esto? ¿O no quiere saber? Las enseñanzas de Bergoglio van completamente en contra de todos los verdaderos papas católicos ortodoxos a lo largo de la historia. El papa Honorio fue anatematizado por la herejía del monotelismo, es decir, fue excomulgado de la Iglesia. Las herejías, la idolatría y la negación de las leyes de Dios por parte de Bergoglio son delitos mucho más graves que la herejía de Honorio.
La entrevista con el cardenal Burke inicialmente da la impresión de ortodoxia, pero luego engaña a los católicos sinceros. Al supuestamente amar a Francisco, deberían reconocer al hereje como el papa legítimo y no entorpecer el camino de la legalización eclesiástica criminal de LGBTQ. El cardenal Burke está obligado a hacer penitencia pública por inducir a una gran confusión a los verdaderos católicos. ¡Debe llamar verdad a la verdad! ¡Debe llamar crimen al camino sinodal de Bergoglio! Debe instar al papa inválido a renunciar, como lo hizo hace cinco años el ex nuncio estadounidense, Carlo Maria Viganò.

+ Elías
Patriarca del Patriarcado católico bizantino

+ Metodio OSBMr + Timoteo OSBMr
obispos secretarios

27 de marzo de 2023

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