Thomas Sowell - Riesgo y diversificación

1 year ago
12

#riesgo #Diversificación #ThomasSowell

RIESGO Y DIVERSIFICACIÓN

Los diferentes niveles y variedades de riesgos pueden ser enfrentados teniendo una variedad de inversiones —una «cartera», como lo llaman— para que cuando un tipo de inversión no esté yendo bien, otros estén prosperando, con lo que se reduce el riesgo global de todos los activos. Por ejemplo, como ya se indicó anteriormente, los bonos puede que no rindan bien en un período en el que las acciones son muy rentables, o viceversa. Una cartera que incluye una combinación de acciones y bonos puede que sea mucho menos arriesgada que invertir exclusivamente en cualquiera de los dos. Incluso añadir una inversión que individualmente es arriesgada, como el oro, cuyo precio es muy volátil, a una cartera puede reducir el riesgo de ésta en su conjunto, ya que los precios del oro tienden a moverse en dirección opuesta al precio de las acciones.

Los riesgos de una cartera que consiste más que nada —o incluso exclusivamente — en acciones también pueden ser reducidos, al tener una mezcla de acciones de diferentes compañías. Éstas puede que sean un grupo de acciones seleccionadas por un inversionista profesional que cobra a otras personas por seleccionar y manejar su dinero en lo que se llama un «fondo mutuo». Cuando la selección de acciones que son compradas por el fondo común es, simplemente, una mezcla de las acciones que componen el Índice Bursátil Dow Jones o el Índice Standard & Poor’s, entonces existe menos necesidad de administrar el fondo y puede que el servicio sea más barato. Los fondos mutuos administran grandes cantidades de dinero de
inversionistas. Más de cincuenta de ellos tienen activos de, por lo menos, 10000 millones de dólares.

En teoría, aquellos fondos mutuos donde los administradores supervisan activamente los mercados y luego eligen qué acciones comprar y vender deberían tener una tasa de rentabilidad más alta que los que simplemente compran cualquier acción que resulta formar parte de los índices del Dow Jones o el Standard & Poor’s (llamados «fondos mutuos indexados»). A varios fondos mutuos que son administrados activamente, en efecto, les va mejor que a los fondos mutuos indexados, pero durante muchos años los fondos indexados han tenido tasas de rentabilidad más altas que la mayoría de los fondos mutuos que son administrados activamente, para la vergüenza de estos últimos. En 2005, por ejemplo, de los 1137 fondos administrados activamente que manejaban acciones de grandes corporaciones, sólo a un 55,5 por ciento le fue mejor que el índice Standard & Poor’s.

Por otro lado, los fondos indexados ofrecen muy pocas posibilidades para capturar grandes oportunidades, de la misma manera que lo podrían hacer los fondos que son administrados de manera activa. Un reportero de The Wall Street Journal que recomendó fondos indexados para las personas que no tenían el tiempo, o la confianza, para comprar sus propias acciones por su cuenta dijo: «Es cierto, probablemente no reirá camino al banco, pero sonreirá con aire de suficiencia». Sin embargo, los fondos indexados perdieron el 9 por ciento de su valor en el año 2000, por lo que nadie está libre del riesgo en ningún lugar. Para los fondos mutuos en su conjunto —tanto los administrados como los indexados— una inversión de 10000 dólares, a comienzos de 1998, valdría menos de 9000 dólares, en 2003. De mil fondos mutuos, sólo uno obtuvo ganancias todos los años del decenio que culminó en 2003. Lo que importa, sin embargo, es si normalmente ganan dinero.

Mientras que los fondos mutuos aparecieron recientemente, en el último tercio del siglo XX, los principios económicos de la diversificación de riesgos han sido comprendidos desde hace mucho tiempo por aquellos que invierten su propio dinero.

Loading comments...