Afortunadamente este chico no es Greta Thunberg, ni pretende serlo.

Él no está pagado por la élite satánica, él no ha estado tres horas en el Parlamento sueco sino mas de un año delante del Ayuntamiento de Sevilla mas de tres horas y dormiendo en la calle durante toda la noche acompañando a afectados por las injusticias de este país. Pero esto nunca saldrá en los medios corruptos. No les interesa, les interesa productos prefabricados. He dicho bien, un producto. Así nos ve la élite. Este joven es la lucha y sobre todo, representa la libertad. Aprendamos de él. La nueva sabia que necesitamos, hoy en día.